Tu...

Lo que más me agrada de tí:
Tu mirada (tibia)
Tu cautela (sigilosa)
Tu aliento (aroma)
Tu protección (inquebrantable)
Tu despiste (inofensivo)
Tus cicatrices (infancia)
Tu infancia (envidiable)
Tu espalda ancha (masculina)
Tu determinación (admirable)
Tu color (compartido)
Tu baile (de manos)
Tu música (calidad)
Tu amigo (hermandad)
Tu pecho (guarida)
Tu badito (mi meñique)
Tus ganas (las mias)
Tu ombligo (pelusita)
Tu perfume (suspiro)
Tu honestidad (confianza)
Tu barba (mi risa)

pero lo que más me agrada en realidad, son los paradigmas rotos del ayer.

¡Te quiero!

Un consejo al azar

Estaba yo en casa esta mañana y andaba buscando cinta adhesiva dentro de un cajón cuándo me encontré un pequeño block de post-its (matanga dijo la changa) y me lo traje a la oficina.

Ya en la oficina y como a eso de las 15:30, sonó mi teléfono, necesitaba apuntar unos datos, apunté rápidamente en mi bloquecito de post-its color naranja-chíngame-un-ojo, arranqué la hoja y me fuí. Momentos más tarde, cuando volví a mi lugar...encuentro el bloquecito, allí dónde yo lo había dejado, con la siguiente frase en la primer hoja

"Nuestro enemigo nos ataca en el punto dónde nuestro orgullo nos hace creer invencibles"

Me quedé un poco sacada de onda, ciertamente la letra es mía, más no recuerdo haberlo escrito. Lo más probable es que la haya visto ó escuchado y me haya gustado, la escribí para después olvidarla en algún cajón, ¡Ja! sin querer esa última frase salió igualita a la rola de Darío ¡Chingonsísimo dueto con la Tabbush! Cada vez me gusta más ese disco. Pero ya me salí del tema... mi punto era/es que me puse a meditar en que siempre que uno se fía de sí mismo, pos (como-diría-la-jica) mimismo nos juega una mala broma. Simón, no hay peor enemigo que mimismo, pues se las sabe de todas todas. Hace sentir tal confianza, que uno piensa que nada puede salir mal, para luego darnos en toda nuestra mauser... en fin. A esa conclusión llegué gracias al dicho papelito... mimisma, nomás no es de fiar.

(Cantidad industrial de trochés)

He caído en cuenta que mis dedos son torpes e inconsiderados. Además de frágiles y atarantados. Pretenciosas falanges que creen saber lo que el rojo palpitar indica; erroneamente creen poder plasmarte en una "paginita-virtual", pero ¿Cómo? si plasmado estás, pero en mi, por ser demasiado real.

Ingenuos... ¡Qué ingenuos son! Jamás podrán escribr de tí cómo se debe, cómo se requiere, cómo se siente...cómo te siento. Incrédulas extremidades con el don equivocado, pues el tacto debería pertenecerle al corazón.

Desistiré.

¿Qué dicen que soy?

"eres un acorde"

Impaciente

Nunca me ha gustado la espera... hé descubierto que tengo paciencia para muchas cosas, pero jamás para la espera. Simplemente no sé esperar.

La fantasía...la mides

Darío Parga

"...se esconde al mentir

y entre los juegos de la mente

se vá la ilusión

que mide la realidad

tan sólo con fantasía..."

-La Fantasía

Ausencia del Mar

Centauro

El Sr. Soraiz tenía razón, centauro.

Aún no es tarde... grabarás, lo sé.
Insisto, el alma tiene memoria infalible. Siempre recuerda bien dónde buscar. Te recuerdo bien, centauro.

¡Cómo quisiera que tu bolero tuviese dueño y se pudiese compartir!

Ella es Lilly. Por fín terminó.