Cumpleañeando

Felíz cumpleaños Silvio y libélula

Llevo dias en que las ideas revolotean por aquí y por allá... dias en los que quiero expresar y trascender, a mi manera, pero algo lo impide. Supongo que se debe a que me siento como una traidora. He traicionado muchos sueños, aquellos mismos que me daban gas, los que motivaban. Un día desperté valiéndome madres y les cerré la puerta en las narices. Tal vez no vuelvan a tocar. Tal vez, por fin se den por vencidos y decidan echarse en la banqueta y dejarse morir. Tal vez.

Encuéntrome emocionalmente fragmentada. Soy algo así como que el agua loca de la embriaguéz anímica. (¡Ja! ¡Qué mamón!). Hay días en que me encuentro estúpidamente llena de rabia... son esos días en que mis ojos nomás ven la injusticia del mundo y provocan eco interno de la rola del Jorge "hermanos, hermanos haciendo la guerra...niños limpia vidrios por unas monedas... del homosapien actual, prefiero ser el animal". La mitad del tiempo me encuentro enfadada por lo que hemos hecho de nuestro hogar. Nosotros que nos jactamos de llamarnos seres pensantes ¡BAH!

Mayela nació y a sus escasos 30 días de nacida, y así de pequeña, luchó por su vida. La impotencia de no poder hacer absolutamente nada ante su dolor, me desarmó y conmovió hasta el alma. Jamás había temido tanto a la maternidad como lo he hecho estas últimas semanas.

Extraño a Miriam...la extraño muchísimo. Estaba tan felíz del viaje a Cuerna, pero seguro ella y la banda entienden que existen prioridades y que me fue imposible dejar a mi hermano solo con la angustia y el miedo. Aún así, lamento tanto no haber podido ir al 4o aniversario de trovadictos. En verdad, lo lamento. No me caería nada mal dejarme caer en un rabo de nube.

Me resulta más fácil ser su amiga que ser su pareja. Las conversaciones son amenas, las miradas libres de rencor y los abrazos de despedida vuelven a ser cálidos. En ocasiones, como cuando veo Friends, lo extraño. En realidad son pocas cosas las ocasiones en las siento su ausencia, pero aún así, me hace falta. Supongo que sí existen los amores imposibles y no precisamente por no ser correspondidos, sino por que nosotros mismos los convertimos en imposibles. Las dudas, los rencores y los fantasmas. Al menos sé, que conservo a mi mejor amigo, el que en verdad sabe todo de mí. Bueno, aunque ese todo solo se limite a mi pasado, del cual ahora él forma parte.

En verdad es difícil entregarlo todo y quedarse con nada. Lleno de vacío como diría el Patraka. Aún así...contradictoriamente tengo ganas, tengo muchísimas ganas y ya me cansé del juego. Odio cansarme.

No soy una excelente amiga. Me temo que no lo soy. Mauricio lleva más de un mes en SLP y ni siquiera he ido a verlo. No sé por qué. En verdad que no lo sé.

Solo sé que no sé ni madres. Ciao.