Friday, July 23, 2004

Imaginando los sueños imaginados

Uno de los obsequios más preciosos que he recibido, indudablemente ha sido que se me haya permitido ser, por un momento, la persona que inspirara palabras tan bellas en un ser tan admirablemente creativo como lo es Efraim Blanco. Gracias Eph, por tus sueños y mi realidad.


eternízame
-efraim blanco

eternízame,
déjame colgarme de ti amor, que hace frío hoy,
alíviame estas ansias, que me canso de volar sin saber a donde voy.

eternízame,
déjame meterme en tu sonrisa,
eternízame en tu cuerpo, en tu alma, en tus manos, en tus pies.

eternízame,
dibuja un sueño que sea solo de los dos,
sácale la foto a nuestras almas, y cuélgala en la pared que dé hacia el norte,
eternízame las manos, con el sabor de tu piel.

eternízame,
déjame no olvidar tu cara, con los ojos cerrados,
eternízame en una lágrima del ojo que llora, eternízame en tu espalda,
eternízame siendo cicatriz, pero no de olvido, eternízame en un lago,
eternízame en tu sueño, con mis manos, con las tuyas, salvándonos.

eternízame imaginaria,
eternízame en nuestra realidad infinita,
y déjame acurrucarme en tu cuna, riendo, sabiendo que seremos siempre,
solo eso, seremos...



Contigo, conmigo, con él...con nadie

Continúo ahogándome en la confusión entre el querer y necesitar. Anoche creí tener claro que en lo que debía enfocarme era la necesidad y no el querer. Esta mañana, bastó una mirada a sus ojos para volver a... ¿Querer? Pero ¿Querer qué?

Lo quiero, sin duda, pero no sé querer como los demás ¿Lo necesito? Si, lo necesito, pero no como él quiere que le necesite ¿Ahora? si, ahora, él me lo ofrece todo...pero mis brazos no son tan fuertes. No lo quiero todo, no sabría que hacer con ello.

Diablos! tanta confusión quema.

Sabina tiene una manera de plasmar todos y cada uno de mis más confusos, obscenos y contradictorios sentimientos, que aún no comprendo cómo es que siendo uno de mis predilectos, no puedo escucharle tanto.

Contigo
-Joaquín Sabina

Yo no quiero un amor civilizado,
con recibos y escena del sofá;
yo no quiero que viajes al pasado y
vuelvas del mercadocon ganas de llorar.

Yo no quiero vecínas con pucheros;
yo no quiero sembrar ni compartir;
yo no quiero catorce de febrero
ni cumpleaños feliz.

Yo no quiero cargar con tus maletas;
yo no quiero que elijas mi champú;
yo no quiero mudarme de planeta,
cortarme la coleta,brindar a tu salud.

Yo no quiero domingos por la tarde;
yo no quiero columpio en el jardin;
lo que yo quiero, corazón cobarde,
es que mueras por mí.

Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.

Yo no quiero juntar para mañana,
no me pidas llegar a fin de mes;
yo no quiero comerme una manzana
dos veces por semanasin ganas de comer.

Yo no quiero calor de invernadero;
yo no quiero besar tu cicatriz;
yo no quiero París con aguacero
ni Venecia sin tí.

No me esperes a las doce en el juzgado;
no me digas "volvamos a empezar";
yo no quiero ni libre ni ocupado,
ni carne ni pescado,ni orgullo ni piedad.

Yo no quiero saber por qué lo hiciste;
yo no quiero contigo ni sin ti;
lo que yo quiero, muchacha de ojos tristes,
es que mueras por mí.

Y morirme contigo si te matas y
matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.

Thursday, July 22, 2004

Las pequeñas gigantas

Es un alma libre. Libre de resentimientos. Libre de ataduras ¿Duras? Ja! Es única, hermosa, sencilla, inteligente, sensible, ligera, lasciva, cínica, tierna, desenfadada, creativa, frágil, intuitiva, alegre, mística y clara a la vez. ¿Cómo pueden tantos adjetivos aplicarse a la misma persona? Sencillo...ella simplemente es uno de esos escasos seres de sonrisa desarmante.

Tan diferente a mi y tan unidas en espíritu. Somos dos mujeres que juntas, nos sentimos gigantas.

Te quiero Mir =)


la giganta
Rodrigo Solís

¡qué dura tu vida, Giganta!

desde tus ojos el mundo
debe parecerte una llanura erizada
por dedos diminutos
que enojados te señalan

los ceños fruncidos
las cabezas que niegan
los suspiros de hastío
han de ser para tí
tan comunes como los lunares

tan tristes como las jaulas

yo creo que te tienen miedo, Giganta
les aterra caer en los abismos de tus pisadas
les asusta
que la luz de tu mirada
alumbre sus pies enraizados en fango
sus cerebros de jaula

por eso blanden en tu contra
gordos libros de leyes empolvadas

¡qué cara tu altura, Giganta!
¿cuánto cuesta en soledades?
porque las voces pequeñas
no alcanzan tus oídos
y los amores enanos
no acompañan

¿cuánto te cuesta en batallas
contra duendes que piensan
que lo pequeño se les quita
por derribar a una giganta?

qué difícil tu lucha
gigantesca aún para tí,
mi Giganta,
que difícil descubrirse al rojo vivo
la sangre en llamas,

aprender a deletrerar "amor"
con la boca llena
por una lengua tibia, amada,
y no saber todavía como,
¿¡cómo pedir perdón!?
por cubrir con tu sombra el sol
a quienes tienen la cabeza
a ras de piso.

Wednesday, July 21, 2004

La güeva existencial

Hoy es un día de esos en los que nada tiene sentido. El calor es extremadamente sofocante, como haciendo irónica alusión a mi estado de ánimo. No, esto vá más allá de la trochés. Algo oprime mi pecho y no sé definirle. ¿Qué quiero? y ¿Qué necesito? El querer y necesitar son dos cosas muy distintas. Dos personas que lo ofrecen y ¿Yo? ¿Yo soy una cínica ensimismada? ¿Cómo saberlo? ¿Cómo evitar lo que uno quiere pero no necesita y lo que necesita mas no quiere? Estoy cansada...

A Veces- Nina Galindo

A veces uno se cansa
de tener abandonado el cuerpo
en un rincón de la memoria
de ser puro cerebro
O como dicen "andar mal de los nervios" (¿trocha?)
Psicópata y neurótico
con músculos que duermen tensos.

No es que envidie a los carniceros
o al cargador de la merced
al marinero o al plano corredor de los cien metros
o al pujin de mi barrio, de todos modos medio enfermo
Ni al juvenal con su mente sana en cuerpo sano.

A veces uno se cansa, de no ser útil consigo mismo
con sus ideas contra el ambiente y de andar de presumido
incoherente...en la güeva existencial.
Esa tu güeva existencial.

Wednesday, July 07, 2004

Buenos consejos

Han sido pocos los consejos que hayan logrado un impacto en mi. Tal vez porque en mi vida existen pocas personas verdaderamente intuitivas y acertivas que me hayan regalado un poco de sí a través de sus consejos. Tengo la suerte de contar con ellas, aunque algunas cerca y otras no tanto, he aprendido que la distancia es relativa.

El domingo, mientras sostenía una conversación muy placentera, de esas que te hacen sentir que no te encuentras muy lejos de donde quieres llegar, se me obsequió uno de esos consejos a los que hago referencia. Aunque le conozco poco, intuyo que se trata de alguien especial.

Chivis, grábate bien esto que me dijo el Toño y es muy cierto. Me ha ayudado a ser una persona congruente o por lo menos, procurar serlo (debe ser un buen consejo, pensé yo, puesto que encuentro demasiada congruencia en él). Medítalo Chivis.

"Lo que haces, no me deja escuchar lo que dices."

Al repetirlo y recordar lo que nos llevó a tocar ese tema, se ha planteado una nueva interrogante...¿Fue consejo u observación?...